Aula invertida: un camino de cambio en la educación global.

Por Equipo de Comunicación, The Electric Academy.  // Tiempo de lectura: 4 minutos.

Existen varias problemáticas urgentes en el actual estado del sistema educativo. Quizás una de las mayores radica en la pérdida de tiempo de clases por parte de alumnos. Ya sea por enfermedad, necesidad, desinterés o distancia, muchos estudiantes no pueden acceder regularmente a sus clases. Por esta razón dos profesores de química de la Woodland Park High School en Colorado acuñaron el término "aula invertida" o "flipped classroom".

Estos profesores crearon un sistema para que los contenidos de la clase se grabaran y distribuyeran entre los alumnos para que pudieran acceder a estos videos en sus casas antes de asistir a clases, invirtiendo las actividades en comparación al modelo tradicional de educación. En el proceso, descubrieron que este método aumentaba las calificaciones de los alumnos.

En estos tiempos tan particulares donde en la mayoría de los países se encuentran en algún tipo de cuarentena, las faltas o abandono por parte de los estudiantes ha incrementado.

De acuerdo a la UNESCO, 1600 millones de estudiantes en más de 190 países se quedaron sin clase debido a la situación generada por el COVID-19. Como si fuera poco, 94% de los estudiantes a nivel mundial fueron afectados por el cierre total o parcial de centros educativos. Por esta razón, este modelo se convierte en una necesidad para la coyuntura actual donde la mayoría de los niños y adolescentes se encuentran todavía encerrados o parcialmente aislados en sus hogares.

Para entender mejor los beneficios del aula invertida, tenemos que analizar cómo funcionan ambos modelos: el tradicional, y el invertido.

Como presenta la imagen colocada aquí arriba, este modelo propone una auténtica inversión en el proceso de aprendizaje, trasladando la carga de la investigación y el descubrimiento a los chicos, que toman un rol de mayor protagonismo.

Al mismo tiempo, traslada la experimentación hacia el aula, haciendo que la dinámica de clase sea más divertida e interesante, y reduce los niveles de frustración de niñas y niños frente a la tarea, ya que la desarrollan en un entorno contenido y con la guía de referentes capacitados para ello.

En consecuencia, el modelo de aula invertida no se queda sólo en grabar videos sino que este medio forma parte de tantos otros que se pueden utilizar para transmitir la información de clase. Por ejemplo, existen muchas academias e institutos que cuentan con una plataforma web donde todo el contenido de la clase (previa y posterior a ella) está al alcance de los estudiantes. Allí pueden encontrar videos, podcast, archivos de texto, audios o enlaces de referencia; todos éstos, recursos que resultan soportes del enfoque metodológico.

El objetivo de este modelo es, por lo tanto, que las y los alumnos puedan aprender de forma autónoma. A través del aula invertida, comienzan a ser parte integral de su educación, aumentando su compromiso y motivación.

Hablemos de beneficios...

Cuando se habla de modelos o enfoques metodológicos que se apartan de lo tradicional, normalmente existe cierta resistencia. La falta de aplicación global hace que resulten difíciles de evaluar en gran escala, y muchas familias se preguntan -con razón- si este es un modelo válido para todos, y en especial para ellos.

El modelo de escuela invertida ha sido ampliamente probado en varios ámbitos de educación, tanto formal como no formal. Los principales resultados observados pasan por el aumento en la autonomía de niñas y niños, así como un menor nivel de frustración frente a la tarea y mejoras sensibles en la capacidad de trabajar en equipo.

Pero si de beneficios hablamos, podemos destacar entre los principales:

  • Fomenta la colaboración constante del alumno para aprender y compartir conocimiento, reforzando sus habilidades de comunicación y su inteligencia interpersonal.
  • Modifica el concepto de material educativo, lo que habilita una nueva mirada en los aprendices, que comienzan a ver reflejado el conocimiento en los elementos de la cotidianidad.
  • Involucra a la familia en el proceso de aprendizaje, generando una experiencia didáctica más rica y transformando el concepto de aula en algo más ubicuo y relevante para la familia.
  • Brinda al docente libertad de realizar actividades individualizadas con los alumnos, lo que permite una mayor singularización de los trayectos de aprendizaje. 
  • Reduce los motivos por el cual un aprendiz no puede “asistir” a clase, ya sea por distancia, enfermedad u otras complicaciones, los aprendices siempre tiene acceso al material educativo.

Sin lugar a dudas, el modelo de aula invertida presenta muchos beneficios, sin embargo los aprendices necesitan algunos recursos y conocimientos tecnológicos mínimos para que su implementación resulte exitosa y la experiencia sencilla para aprendices y sus familias. De acuerdo con este artículo de Unicef, gobiernos e instituciones podrían facilitar recursos e infraestructura para disfrutar de este sistema que ha probado ser efectivo, exitoso y moderno.

Citando un estudio realizado por Microsoft al respecto: este modelo híbrido acepta lo digital para amplificar, acelerar y conectar alumnos y aprendizaje, mientras intencionalmente se enfoca en competencias globales y académicas; y es por eso que cada vez más, instituciones, familias y aprendices lo abrazan.

Close

50% Complete

Two Step

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit, sed do eiusmod tempor incididunt ut labore et dolore magna aliqua.